If only we are excited or interested in the large, the large ads (which, on the other hand, almost always not materialize never), so anything we want.

Because any activity is made great efforts and sacrifices achieving small results, through anonymous heroes, who are what make things stringing beads one after another.


miércoles, 2 de septiembre de 2015

6. RECURSOS HUMANOS, LIDERAZGO y CONFLICTO

CAPÍTULO 6 RECURSOS HUMANOS

Contenido del presente capítulo
.I. LIDERAZGO, UN CONCEPTO POLÉMICO
.a. El líder “institucional”
.b. Concepción “Situacional”.
.i. Concepto
.ii. ¿Dirigente – Líder – Adminis- 
     trador?
.II. SISTEMAS DE DIRECCIÓN “1”
.iii. Antes de Selznick: Sistemas de Dirección
.1. Modelo Continuo del Liderazgo
.2. Modelo Rejilla del Liderazgo
.a. Liderazgo “Club de Campo”
.b. Liderazgo Burocrático
.c. Liderazgo Empobrecido
.d. Liderazgo de Equipo
.e. Liderazgo en el Medio
.3. Modelo de Rensis Likert
.a. Sistema "0"
Sistema "1": autoritario explotador
.b. Sistema "2": autoritario benevolente o paternalista
.c. Sistema "3" consultivo
.d. Sistema "4" participativo
.e. Sistema "5": participativo con autoridad relacional
.4. Modelo “Trayectoria-Meta”
.III. SISTEMAS DE DIRECCIÓN “2”
.iv. Después de Selznick Sistemas de Dirección: Situacional
.1. Modelo de Blanchard, Hersey y Johnson
.2. Modelo de Bernard Bass
.3. Los Modelos de Mintzberg
.a. “Administrador Contingencial o Transformacional”
.b. Teoría de la Política de Gestión
Funciones Interpersonales, Funciones informativas, Rol de Decididor
.c. Formación para la Dirección
.4. Modelo de Dave Ulrich
.IV. DIRECCIÓN BASADA EN RESULTADOS
.a. Modelo de Edward Marshall
.V. ¿Y SI PARA EL DIRECTIVO TODO ES POLÍTICA…?
.VI. ¿Y SI EL DIRECTIVO NO DIRIGE o ES PERVERSO…?
.a. Dirección de Kusy y Essex(12)
.i. Fallos de Análisis Político
.ii. Clima laboral represivo
.iii. Fracaso en el reclutamiento de talentos
.iv. Demasiadas Heridas
.v. Alineación
.vi. Derrumbe del compromiso
.VII. CONFLICTO ¿Por qué?
.VIII. ACCIONES PARA RESOLVER
.a. Pasos
.b. Acciones
.IX. PROCESOS RESOLUTORIOS, ¿CUÁLES?
.a. Negociación
.b. Mediación
.c. Arbitraje, Litigio o Juicio
.X. NEGOCIACIÓN, ¿POR QUÉ?
.a. Las Posiciones
.b. Los Intereses
.XI. ¿CÓMO NEGOCIAR?
.a. Herramientas
.i. Entrevistas
.ii. Preguntas
.iii. Perspectiva aérea



LIDERAZGO


En el desarrollo de las denominadas “Escuelas”, al considerar la de “Relaciones Humanas” y sus continuadores de la Psicología y la Sociología, apareció el fenómeno del Liderazgo y, por ello presentamos algunos modelos muy conocidos.

Corresponde ahora examinar el concepto de “Liderazgo” en un devenir más contemporáneo y enfocarlo con la precisión que le fueron dando autores más modernos.

Por ello, en nuestro estudio aceptamos (como hemos expuesto más arriba) que se considere a los términos “liderazgo”, “gerencia” y “dirección” como equivalentes, aunque desde nuestro punto de vista es éste último el que debería prevalecer en los estudios.

Ya desde el tiempo en que Elton Mayo(1) puso en valor la idea, al sostener que “…los estudios en ciencias sociales no desarrollan ninguna habilidad que sea directamente útil a las situaciones humanas…”

El no creía que fuera posible desarrollar actividades útiles hasta que las personas aceptaran la responsabilidad de las situaciones humanas particulares.



En la historia del desarrollo de estos conceptos, una primera parte del examen de lo directivo y grupal ya las hemos presentando en las Corrientes de la Sociología Industrial y la Psicología Industrial, principalmente porque dichos estudios se centraban en las características convenientes para ordenar y mandar, y en el análisis y métodos provenientes de otras disciplinas para conducir.

Estos modelos; Teoría del Gran Hombre, Teoría de los Seguidores o Adeptos, Teoría Ecléctica; que han sido muy transitados, refieren principalmente a un tipo de liderazgo “interpersonal”, cuya labor es la de aligerar el ritmo de la interacción humana, facilitar la comunicación, evocar la devoción personal, y aquietar la ansiedad.

Sin embargo, una “segunda etapa” se inicia a partir de Philip Selznick(2); quién es el primer proponente de un “modelo de liderazgo contemporáneo”, pasando al denominado “institucional”, que procura persuadir a gerentes de negocios y militares que los ideales de servicio a la comunidad y la política liberal apoyaba sus intereses.

El líder “institucional” es fundamentalmente un experto en la promoción y protección de valores, más allá de los requisitos técnicos, que maneja asuntos actuales, no por ellos en sí, sino de acuerdo con sus implicaciones a largo plazo para con la función y el sentido del grupo.

Este liderazgo es mucho más que la capacidad de movilizar apoyo personal; que la preservación del equilibrio a través de soluciones rutinarias de los problemas cotidianos, exige una autoevaluación constante de sí mismos, y es posible que requieran tan sólo de unas cuantas decisiones críticas en un período de tiempo muy largo.

Se advierte prontamente un paralelismo relativo al largo plazo, valores preservación de las comunidades, con el Enfoque que nosotros denominamos “Estratégicas”, Responsabilidad Social, los stakeholders y el propio personal, que exigían al “líder” condiciones distintas.


La denominación actual de esta concepción se denomina “Situacional”.

Ahora, dirigente, decisiones y futuro son partes de la misma realidad.

De todas maneras, humildemente, proponemos las siguientes clasificaciones, esperando que quienes las consulten tengan en cuenta que son provisionales con respecto a conceptos cuya naturaleza también es provisional, y que según los conocimientos, el punto de vista o el gusto de los autores, las mismas variarán.




UN CONCEPTO POLÉMICO


I. Concepto
Hablar de liderazgo es referirnos a un concepto polémico, cuya práctica ha sido y será objeto de muchas investigaciones sociales, que abarcan desde el perfil de los líderes que han desarrollado y adaptado a lo largo de la historia, hasta la identificación de los elementos o circunstancias que los generan y mantienen al frente de los grupos sociales.

A pesar de lo que se cree, la sociedad moderna, puede describirse como deseosa de normas detalladas y regulaciones, conforme a las cuales, alguien que la conduzca; el líder de hoy, está obligado a ser un constante agente de cambio.

Con las excepciones del caso no se trata de un asunto nuevo: hace mucho tiempo Douglas Mc Gregor lo conceptualizó como el “Hombre X” (una variante del antiguo hombre holgazán de Taylor).



Por su parte, las organizaciones demandan de una nueva generación de directivos, capaces de retar los procesos, inspirar una visión compartida, levantar los ánimos, canalizar positivamente la inconformidad, así como de capacitar a otros para la acción, usar la “política” solo como un medio cuestionador para dinamizar el funcionamiento.

Y ser esencialmente “decentes”, no como parte del modelo “full” sino del “estándar”.

Tampoco para beneficio personal o para destrozar oponentes, ni de charlatanes o lenguaraces que repiten discursos de otros, no hacen nada y miran de soslayo “que dice el jefe”.


Un verdadero líder enfrenta el reto cotidiano de desarrollar habilidades para conducir el cambio y a la vez influir en su rumbo, dirección y amplitud.    Algunos lo han logrado, otros, simplemente lo han dejado pasar.

Los líderes son pioneros por naturaleza, se atreven a salir de lo convencional y buscan nuevas formas de hacer las cosas.    Esta práctica la realizan mediante dos compromisos: la búsqueda de oportunidades y la toma de decisiones.

Además, el verdadero líder es quien comienza a autoeducarse y perfeccionarse en la práctica de las virtudes humanas.    Con su ejemplo estará marcando la pauta para que otros a su vez busquen desarrollarse y desempeñarse de una manera integral, debiendo de predicar con el ejemplo.

Pero, a menudo, el sistema comporta factores imponderables.

Ante ello una solución ha sido

.a. Tratar de reducir la incertidumbre, …la ambigüedad e imperfección mediante un fuerte aparato de verificaciones, controles, cuantificación y enfrentamiento conflictivo (confrontación).

Fue un modelo frecuente, por caso, de Harold Geenen, quien desde 1959 hasta 1977 fue el presidente y director ejecutivo en International Telegraph; Telephone Corp.
Si se piensa que la dirección de empresas debe llevarse a cabo como un plan militar sin tener en cuenta aspectos humanísticos y al servicio exclusivo de los objetivos financiero este sistema va bien no necesita ningún guante de seda.
En este caso es seguro que el emprendimiento que dirija nunca desplegará su pleno potencial o acaso no sobreviva.

.b. Otro planteo es el de admitir que solo cierta parte de los problemas puede solucionarse …a partir de la organización directamente y que para el resto es mejor ser cuidadoso.

Este personaje crea las condiciones para que las “cosas” necesarias sucedan y procede para   que sus deseos se concreten.
En todos los casos esto ya no ocurre en el vacío; como siempre pues ningún logro trascendente se obtiene sin trabajo, obvio es decirlo.

La “suerte” a veces ayuda, es el caso que su organización contenga a un “genio entrepreneur”(3), o quizás Ud. mismo lo sea.


Pero no es definitivo.    La labor dirigente aplicada es imprescindible: no se debe esperar ni confiar en el laissez faire, o por caso, en las misiones claramente programadas de los burócratas.

Así se ha desarrollado el “tipo bombero” de apagar incendios, enfrentar crisis o destruir las serpientes víboras que rodean a la muchacha (Indiana Jones), además porque la otra realidad parece menos importante o interesante.

Además, la toma de decisiones no heurística (intuición y el coraje), operativa o rutinaria no es siempre divertida.    Cuando el que lo hace “se juega”, verdaderamente compromete o arriesga no solo el negocio o emprendimiento, sino su trabajo, su futuro, y si en muchos casos produce la satisfacción de la acción, siempre genera stress gerencial.

En el contexto de estos problemas, hay un sinnúmero de definiciones de liderazgo a los que denominamos “modelos”, en las que hay un denominador común: influir en la conducta de los demás: personas o grupo de personas.    Los examinamos:


II. ¿Dirigente – Líder –Administrador?
Se trata aquí de otra polémica innecesaria, por lo que a nuestro gusto, debemos descartarla, sin por ello desconocer algunas de las características que han presentado los diferentes tipos.



.i. Con mucha frecuencia la llamada “sorpresa” avisa, no lo es tanto, pues no es otra cosa que información “extemporánea”, difícilmente obtenible o “desestructurada” que no es asimilada o interpretada con anticipación.

Estar atento a ella, captar sus “señales” y desentrañarlas adecuadamente, constituye –con toda seguridad-, el impacto principal real de la dirección en los negocios empresarios.


En verdad, los “héroes” son aquellos que se ocupan de mejorar progresivamente sus productos y servicios históricos, anticipándose a las necesidades en evolución de los clientes; y los superhéroes son los que descubrieron el secreto de dar forma a esas necesidades y a influir sobre ellas.

Es posible que haya líderes desorganizados, pero no puede haber directores sin modelos organizados ocupados en descubrir hechos nuevos.

.ii. En segundo término, aquellos dirigentes que han tenido mayor presencia en la historia de la humanidad, han sabido manejarse a sí mismos: siempre –primero que nada- han ejercido su propio autoliderazgo devenido luego en las facetas de su liderazgo conocido.

Eso es, en gran medida, lo que definió su capacidad de inspirar en los seguidores un enorme compromiso con sus causas, sacrificio, dinamismo y los hizo tan exitosos.    Este enfoque del liderazgo reconoce que existe una interacción entre el grupo y el líder.

Apoya la teoría del seguidor, en el sentido de que las personas tienden a seguir a aquellos que consideran (con razón o equivocadamente) que les ofrecen los medios para cumplir con sus deseos personales.

Por lo tanto, el líder es la persona que reconoce estos deseos y hace cosas para cumplirlos.

Sin embargo ellos… ¡son los menos!    Tanto esos talentos como sus logros deben considerarse fuera de los límites de la existencia humana común y corriente.


El resto de los mortales, inclusive los menos dotados, pueden aprender a autogestionarse, manejarse a sí mismos, desarrollarse, o ubicar el lugar donde pueden dar su mayor contribución.

Y mantener la mente alerta y ocupada durante toda la vida laboral para –eventualmente- ocupar la posición a que sus capacidades los hayan llamado.




SISTEMAS DE DIRECCIÓN Modelo "1"


.iii. Antes de Selznick Sistemas
de Dirección
El estilo de liderazgo se refiere al patrón de conducta de un líder, según como lo perciben los demás.


El estilo se desarrolla a partir de experiencias, educación y capacitación.

Es importante que el líder descubra su estilo, lo conozca, lo depure y comprenda ya que afectará a los miembros del grupo o seguidores.

Y será su estilo de liderazgo el estímulo que mueva a cada uno ante diferentes circunstancias.

Dado que casi todas las descripciones de liderazgo se concentran en los atributos que se creía conformaban un líder empresarial, la correlación hecha en sus investigaciones demuestra que de poco sirve poseer el perfil para comandar una organización, si a la hora de medir los resultados no se llega a sus objetivos cuantitativos (¿¿Taylor, Porter??).

Los especialistas aseguran que las razones de esta caída en la capacidad de liderazgo de los mandos se corresponde a la seguidilla de fraudes multimillonarios.

También ha contribuido la crisis política y económica, sus correlatos de desempleo o reducciones, y la virtual inexistencia de “personalidades significativas” a todo nivel mundial, que "han menguado las oportunidades para desarrollar el liderazgo".

En este punto, se puede señalar las características “neoclásicas” principales que estos modelos de liderazgo tienen:

.1. Crear “visión” o una meta de orden superior, que atrae el compromiso y energías de los seguidores.
.2. Producir imagen de éxito y competencia, poniendo por ejemplo el propio comportamiento, y los valores que sostienen.
.3. Comunicar sobre el desempeño de sus seguidores   grandes expectativas.
.4. Dar la seguridad de que se corresponderán a ellas.
.5. Entender a los clientes.
.6. Empowerment (dar “poder” o capacidad de tomar decisiones) a los demás.
.7. Actitud de pasión personal por el trabajo.
.8. Disfrutar los cambios.
.9. Saber armar equipos
.10. Identificar y aprovechar las oportunidades.
.11. Pensar en términos globales.
.12. Ser decidido y proactivo.
.13. Tener aptitudes para motivar.
.14. Gerenciar la complejidad con sus secuelas de ambigüedad, paradoja, incertidumbre, incorrección, policausalidad de los fenómenos y “ordenarse en el ruido”.
.15. Demostrar integridad.






Cuando alguien adopta un papel de líder dentro de una organización, mucho de su estilo depende de cómo maneje sus habilidades, tanto técnicas, como humanas y conceptuales, se trata de una idea antigua, que se refleja en la figura:


En cuanto a la habilidad técnica nos referimos a la capacidad para poder utilizar en su favor o para el grupo, los recursos y relaciones necesarias para desarrollar tareas específicas y afrontar problemas.

El otro elemento es su habilidad humana a través de la cual influye en las personas, a partir de la motivación y de una aplicación efectiva de la conducción del grupo para lograr determinados propósitos.

El tercer elemento corresponde a la habilidad conceptual, aquella capacidad que se tiene para comprender la complejidad de la organización en su conjunto, y entender donde engrana su influencia personal dentro de la misma.

De igual modo que en otros casos, la posibilidad de actuar de forma más efectiva se manifiesta a través de Modelos de diferentes autores.

Veamos continuación a:

.1. Modelo Continuo del Liderazgo
El concepto del continuo del liderazgo, fue propuesto por primera vez 1958 por Robert Tannembaun y Warren H. Schmidt(4), siendo reformulado y adaptado al concepto “situacional” posteriormente.


Se describe allí la progresiva adaptación de los estilos de liderazgo a diferentes contingencias o situaciones decisionales.

Como se muestra en la figura, consideran que el liderazgo incluye diversos estilos, que van desde uno altamente centrado en el jefe hasta otro altamente centrado en el subordinado.

Los estilos varían de acuerdo con el grado de libertad que el líder concede a los subordinados.


Por lo tanto, en lugar de sugerir una opción entre estilos de liderazgo extremos (Dialogía autoritario o democrático) este enfoque ofrece una variada gama de estilos o “continuo, sin sugerir que uno sea siempre correcto y el otro todo lo contrario.

Se trata de estructurar la influencia permanente, que tiene un referente colectivo, toda vez que se dirige sobre un número relativamente amplio de personas y durante un tiempo considerable.

Así, cuando se procura expandir el compromiso de los diferentes participantes se desarrollan los siguientes planos:

.i.
Comunicar
El supervisor toma la decisión y la comunica. Este identifica un problema, considera las soluciones posibles, elige una y la comunica a los subordinados con objeto de implementarla.
El supervisor puede tener en cuenta o no lo que los empleados piensan sobre la decisión. En cualquier caso, no les ofrece oportunidades para participar en el proceso de toma de decisiones: "Por favor vaya y empiece a cargar el camión ahora".
.ii.
Vender
El encargado toma la decisión y explica sus motivos a los subordinados con el objeto de conseguir su aceptación de ella.
Éste asume la responsabilidad de identificar el problema y de generar la solución, si bien reconoce la posibilidad de ciertas resistencias entre aquellas   personas que tienen que implementarla.
Y ahora sabemos que tal “resistencia al cambio” se produce siempre y que en estas condiciones siempre es intensa.
Él puede indicar a los empleados lo que conseguirán con esta decisión: "Empiece a cargar ahora.    Las cajas están acomodadas a la intemperie y conviene hacerlo para evitar daños a causa de la lluvia, además que será muy difícil entregarla mojada."
.iii.
Ofrece y Compara
El capataz presenta su decisión como una idea e invita a los subordinados a plantear cuestiones, preguntas o comentarios.
En este caso el superior ha llegado a una decisión provisional, más antes de que se lleve a cabo, brinda una explicación de su fundamento y les ofrece a los subordinados la oportunidad de presentar sus aportes o presentar sus desacuerdos.
Este retiene la iniciativa de diagnosticar el problema así como de la decisión final si bien solicita opiniones de los empleados afectados: "He pensado comprar tal cosa.     Es muy bueno, el precio es razonable, y el grupo de mi hermano afirma que el producto ha   resultado bastante fiable.    ¿Qué piensan al respecto teniendo en cuenta para que lo vamos a usar?"
.iv.
Incluye
El capataz presenta un problema y solicita a los empleados ideas y sugerencias y a continuación él toma la decisión, aunque admite que la misma no será inalterable.
Nuevamente, es el supervisor el que en última instancia toma la decisión, si bien los empleados proporcionan y analizan gran parte de la información en la que la decisión puede estar sustentada.
El jefe se beneficia de sus conocimientos y experiencia: "Nuestros datos muestran que este año, comparándolo con cualquiera de los cinco anteriores, hemos sufrido más del doble de daños por estibaje durante el invierno.    ¿Por qué creen que ha ocurrido y qué podemos hacer?
.v.
Involucra en las sugerencias
El administrador pasa a los empleados parte de la decisión al ofrecer que ellos formulen aportes a la toma de decisiones.
Este plantea la existencia de un problema, destaca las limitaciones a las soluciones y básicamente se compromete a aceptar lo que los empleados recomienden.
Éstos diagnostican el problema y consideran alternativas para abordarlo.
Si el superior participa en el proceso de toma de decisiones, lo hace como un componente más del grupo implicado: "Vamos a tener que arreglar el techo del galpón.    Muchachos, me gustaría saber si ustedes podrían hacerlo, cómo, y qué gastos extras tendríamos que asumir."
.vi.
Transfiere la capacidad de decisión a un grupo dentro de cierto límites
Etapa en la que el jefe plantea la existencia de un problema, destaca las limitaciones a las soluciones y básicamente se compromete a aceptar lo que los empleados decidan dentro de unos límites prescritos.
Éstos diagnostican el problema y consideran alternativas para abordarlo.
El superior no participa en el proceso excepto estableciendo los marcos en los que deberá efectuarse: "Vamos a tener que arreglar el techo de la bodega el miércoles, porque sólo seis de nuestros camiones están cubiertos.    Muchachos, ¿cómo prefieren hacerlo, y qué gastos extras piensan que se producirán?"
.vii.
Participación plena
Admite la trasferencia de la decisión y las responsabilidades de forma completa a los subordinados: “¿Advirtieron que el techo del galpón tiene problemas, podrían ocuparse de eso?, pidan lo que necesiten y háganlo.


.2. Modelo Rejilla del Liderazgo
Este desarrollo se origina en los estudios de la Universidad de Michigan que habían comenzado en la década del 40’, tomando unas 1000 características individuales, y trabajando las dos más comunes: relación con las personas y/o relación con las tareas.


Los autores que lo publicaron fueron Robert Blake y Jane Mouton(5) en 1964.


Este estilo presenta cinco variantes que pueden oscilar entre los extremos del dejar hacer sin intervenir hasta el de controlarlo todo, orientado al trabajo, las metas, los resultados o a “la dirección” y del orientado a las personas o de “apoyo y estímulo a los trabajadores.



Una combinación adecuada a cada entre de los límites de esas dialogías es lo más usual.

En nuestros tiempos se sigue citando con diferentes variantes de la relación jefe/personas/tareas y algunos cambios menores en las denominaciones que señalamos seguidamente.

.i.
Liderazgo “Club de Campo”
Destaca la alta preocupación por la gente y la poca para la Producción
Un líder de club de campo atiende sobre todo las necesidades y sentimientos de sus empleados o sus o miembros del equipo.


Este líder presupone que los miembros de la organización a trabajar duro si se sienten felices y seguros.


.ii.
Liderazgo Burocrático
Posición de alta preocupación por la preocupación de Producción / bajo para las personas, antiguamente denominada "Clásica" o "Burocrática".
Este líder está acuciado por la eficacia de la producción, y, probablemente, considera a los trabajadores como un medio para lograr grandes resultados.
También tiene la necesidad de un lugar de trabajo productivo y eficiente.


.iii.
Liderazgo Empobrecido
Es característico por su escasa preocupación por la Producción y las personas, ya que se trata de un dirigente muy ineficaz.
El líder no tiene ni gran respeto por la creación de sistemas eficientes, las reglas de la estructura de los procesos de trabajo, ni para la creación de un ambiente de trabajo motivado o satisfecho.


.iv.
Liderazgo de Equipo
Enfocado a la alta preocupación por la Producción y por las Personas.
De acuerdo con el modelo de Blake-Mouton, este es el estilo de liderazgo mejor y más eficaz.    Nosotros lo llamamos "Estratégico", y es, probablemente el más deseable.


.v.
Liderazgo en el Medio
El detalle refiere a una acción intermedia y de atención a la Producción y por las Personas simultáneamente.
Este estilo trata de equilibrar estas dos cuestiones de la competencia.    Probablemente, puede parecer como una gran solución, aunque el riesgo en este caso es que no haya suficiente atención por la gente ni por la producción.
Este grid puede ser superpuesto al modelo de 2x2 coincidiendo los cuadrantes con los cuatro tipos generales, estando del "Medio" en la intersección de las cuatro secciones, o en el cuadrante del medio de la matriz GE-McKinsey (selectividad).


.3. Modelo de Rensis Likert

Otra manera de ver la perspectiva de Rensis Likert (1903-1981) quien desde 1961 ha contemplado “cuatro sistemas”, desarrollándose un quinto hacia 1974, en parte influido entonces por los desajustes que producía en la dirección empresaria la 1º Crisis del Petróleo.



La representación gráfica se denomina “bisagra” porque los triángulos inferiores parecen “pivotear” a partir de la intersección de sus cúspides en los de más arriba.


Sistema "0"
Se trata de la organización que no tiene estructura y funciona exclusivamente por la voluntad de un jefe de tribu.
Un buen ejemplo resulta la nación judía antes que Dios diera a Moisés las indicaciones de lo que necesitaba para alcanzar la Tierra Prometida.
Habían pasado casi cuarenta años para recorrer la mitad del camino en el desierto, y Dios le advirtió que lo que estaba haciendo era demasiado para él solo, por lo que necesitaba “capitanes” para 1000, capitales para 100, capitanes para 50 y capitanes para 10; en otras palabras ámbito de control y un criterio de delegación que hoy se conoce como “por números fijos”.
Cuenta la Biblia que también le pidió que estableciera un “Staff” dando participación a otros patriarcas.
Probablemente se puede decir, a partir de entonces, que fue Moisés el primer gerente con Staff; además de que incluía para aquellos que no cumplieran un sistema punitivo conocido como “ojo por ojo, diente por diente”.
Hasta la Revolución Francesa, todo tipo de otros reyes, caciques, emperadores o cualquier clase de autoridad religiosa o legal, actuaba con este criterio.

Sistema "1": autoritario explotador
La denominación de Autoritario tiene que ver con autoridad, dado que en último extremo es la acción de aquel que puede tomar decisiones y hacerlas cumplir aún por medio de la fuerza (aunque nosotros hemos definido esta idea como Poder, reservando el de autoridad para aplicarlo al ejercicio de poder descentralizado).
En su forma más descarnada, este procedimiento consiste en obligar a las personas a trabajar bajo amenaza de ser despedidas si no lo hacen.
Este prospecto se basa en la idea taylorista que la única motivación de las personas es ganar dinero, y que se asustaran se temen perder su fuente de ingresos.
En tal sentido, Sayles y Strauss(6) desarrollan la idea del "sé fuerte, se duro", partiendo de la necesidad que se haga el trabajo quebrando toda resistencia y antagonismo, y es un criterio que dio buen resultado en tanto la gente estuviera en tal estado de necesidad que el aspecto "fisiológico" de sus necesidades prevaleciera.
La presencia de los sindicatos disminuyó en gran medida este tipo de gerencia, el que se fue transfiriendo hacia los niveles de supervisión (gerencia media y luego Tecnoestructura y Staff), que por su propia naturaleza no estaban sindicalizados.

Sistema "2": autoritario benevolente o paternalista
A través del tiempo, se comprendió que una autoridad benevolente resultaba más productiva, y se produjo una tendencia a moverse hacia este modelo.
Se reemplaza la idea del "sé fuerte" por la de "sé bueno".
Se presentaron prontamente
dos clases de "benevolentes":
a. Paternalismo ingenuo: resultado probable de un genuino interés de los patronos por sus obreros, resultando en proyectos consistentes en "dar" servicios sociales, descansos, cafetería y lograr la adhesión de las personas por la gratitud.
Algo quedó claro: con la limosna no se lograba agradecimiento sino rencor por depender la buena voluntad de la otra parte, que retenía su poder decisional e incluso el de asignación de la riqueza generada disponible.
b. paternalismo sutil: consiste en otorgar toda esa misma clase de recompensas y una supervisión razonable con lo que -está demostrado desde antiguo-, mejora la moral de trabajo, redundando una producción más elevada.
Se descubrió que las personas prefieren trabajar a su aire, con poca supervisión, haciendo las cosas como saben hacerlas.
No quedaba muy clara la necesidad dirigente de luchar por mantener fuera de la empresa a los sindicatos, y esta era la situación en que se encontraba hacia 1924 Hawthorne de la Western Electric cuando Mayo inició sus estudios, de modo que se asume que esta empresa representa el modelo .a. y luego el .b.
Cuando pasaron a reconocer el "estándar grupal", adoptaron el tipo de "convenio implícito" según el cual no se haría uso de la fuerza si los empleados no restringían indebidamente su rendimiento.

Sistema "3" consultivo
Con este tipo de gestión, se advirtió que cuando la gente era involucrada en las decisiones que les afectaban, se obtenían mejores resultados (y esto que no es otra cosa que la premisa del Compromiso para Planeamiento, fue llevando a teorías como "Grupos Z", "Círculos de Calidad", "Kaizen" y otros tipos de dirección que estuvieron muy en uso en Japón.

Sistema "4" participativo
Esencialmente se procura encaminar la motivación humana de modo que genera una tarea de cooperación voluntaria en lugar de producir antagonismo.
Este tipo de conducción incluye el conjunto de relaciones de ayuda en grupos   superpuestos, la solución de problemas por consenso (teniéndose presente que una vez que se ha formulado el consenso, ya no puede el participante desligarse aduciendo tener otra idea, sino que la asume en su totalidad) y el trabajo colaborativo.
El líder democrático consulta con sus subordinados y alienta su compromiso, capacita y espera de los mismos su proactividad.
No deja de preguntar a los participantes antes de tomar las decisiones, aunque en él recae la decisión final.
Este sistema utiliza el criterio de "autorrealización" de Maslow (que se ve en Pirámide de Maslow) combinando esta fuerza emocional con la estructura para lograr una más alta productividad, e incluye conjuntos de miembros superpuestos, lo que se denomina "organización bisagra" o de "grupos interpenetrantes".
Las pruebas realizadas sobre estilos participativos por Coch y French(7) no lograron ser repetidas en iguales condiciones, lo que ha demostrado que el paso de "2" a "4" no es automático ni lineal.
Se piensa que durante el curso del tipo "3" se generen relaciones de confianza y compromiso que empiezan a construir las bases de tipo "4".
Con "gran facilidad" este modelo deriva a un proactivismo desenganchado o suelto, o degenera en el liderazgo Laissez Faire- Dejar Hacer, dejar pasar, que en "Entropía y Dirección" hemos denominado "Soga Larga" y otros llaman "Rienda Suelta".
Lo destacado de este tipo es que el líder utiliza muy poco su poder y depende en gran medida de los subordinados para fijar sus propias metas y los medios para alcanzarlas.
Su papel es un mero apoyar las operaciones de sus seguidores al proporcionarles información y actuando primordialmente como un contacto con el medio externo   del grupo, y en el extremo, que hagan lo que "se les dé la gana" como si a él no le importara.
En la medida que "funciona" es muy frecuente por la "comodidad" que resulta para el jefe.
Es fácil no mirar alrededor en busca de eficiencia, y es seguro que descubriremos el modo mejor de hacer las cosas y de utilizar recursos que -a priori- parecían no estar.

Sistema "5": participativo con autoridad relacional (propuesta de nuestro curso)
Una evolución posterior apareció cuando el supervisor no puede obtener consenso, y necesita actuar, entonces, a él le corresponde llevar a cabo esa acción: es su responsabilidad.
El superior tiene todavía la autoridad "primaria", actuando no por su posición jerárquica sino por la responsabilidad ante la organización.
Esta tipología fue esbozada hacia 1974, y procuraba resolver la Dialogía de actuar cuando no se llegaba a acuerdo o consenso en un tiempo prudente.




4. Modelo "Trayectoria - Meta"
Es tarea del administrador crear un ambiente de trabajo apropiado, para que los subordinados logren alcanzar las metas organizacionales, incluyendo



1: identificar la diversidad en la naturaleza de las tareas, para poder establecer resultados realistas.
2: dar refuerzo material y técnico, y proporcionar los elementos auxiliares necesarios para la labor (con ello probablemente se sobrepasará un desempeño eficiente).
3: concretar la ayuda prometida durante el desempeño (trayectoria) de las tareas.
4: reconocer las características personales de los trabajadores.
5: utilizar trato humano, reconocimiento y la valoración de cada empleado.
6: vincular las “recompensas” con el producto solicitado (si está a la vista el beneficio que los empleados lo recibirán si logran resultados; y si son alcanzables en el corto plazo; probablemente harán el esfuerzo.

Se hace visible, en este Modelo de Robert House de 1971la importancia de la relación y los intercambios entre el superior (¿¿líder??) y los miembros del grupo participantes.





SISTEMAS DE DIRECCIÓN Modelo "2"



IV. Después de Selznick Sistemas de Dirección: Situacional
En la medida que aumentó el desencanto con los sistemas o teorías del “gran hombre”, de los “rasgos” y de los “seguidores”, o de las características para entender el liderazgo, la atención se centró en el estudio de situaciones y la idea que los líderes son, más bien, producto de situaciones.



Veamos algunas tipologías características:


.1. Modelo de Blanchard,
Hersey y Johnson
La teoría fue introducida por primera vez como "Teoría del Ciclo de Vida de Liderazgo" (recordamos que la idea de “ciclo de vida” es de 1965 de Leavitt) en 1969, posteriormente en los 70’ pasó a llamarse "Teoría del Liderazgo Situacional", y como tal se ha venido afirmando.


La base fundamental de la teoría del liderazgo situacional es que no existe un único "mejor" estilo de liderazgo.

Así, el liderazgo efectivo es relevante para la tarea, y los líderes más exitosos son aquellos que se adaptan a su estilo de liderazgo usando su capacidad de establecer metas altas pero alcanzables, y la voluntad y potencialidad para asumir la responsabilidad de la tarea por parte de los subordinados; así como la educación de las personas o grupo que sobre quienes se está tratando de aplicar su influencia.


El liderazgo efectivo es variable, no sólo con la persona o grupo que está siendo influenciado, pero también depende de la tarea, trabajo o función que debe ser cumplida.

Debido a que uno de los ejes de la Teoría estaba en el grado de entrenamiento y capacitación de los subordinados, retrotraía en parte a los modelos de los “seguidores”.

Encuentra, por otra parte, que el administrador torna en un individuo cuya función se centra en la conducción del trabajo colectivo, hacia los límites establecidos en su propio planeamiento.

Esta preponderancia del individuo, es lo que da fortaleza y debilidad, simultáneamente, a las organizaciones.


En 1982, un trabajo de Blanchard Johnson en esta línea, se convirtió en un “best seller” y ha vende casi inmediatamente, hasta 13 millones de copias, siendo traducido a 37 idiomas



El crecimiento que han mostrado las empresas dirigidas por jefes carismáticos, está sustentado precisamente, en las habilidades y capacidades de una sola persona, que imprime un gran dinamismo y motivación a la organización.

Pero…, si el líder se ausenta, la dinámica ¡¡decae!!


.2. Modelo de Bernard Bass

El modelo de Bernard M. Bass (1985), habla de "liderazgo transformacional" como opuesto al "liderazgo transaccional" que es más rutinario y diario.



El líder transformacional tiene éxito al cambiar la base motivacional del individuo desde una motivación regular hasta llevarla al compromiso y actuar para hacer más de lo que inicialmente se debía hacer.

Así:


(a) Incrementar el sentido de importancia y el valor de las actividades de los seguidores;
(b) Lograr que se olviden los intereses personales para bien del equipo, la organización o una política general; y a
(c) Elevar el nivel de las necesidades hasta otras de nivel superior (llegando al cabo a la “máxima”: la autorrealización).



.3. Los Modelos de Mintzberg
.a. Administrador Contingencial o Transformacional.



Desde 1973, este autor ha venido sugiriendo, también, una teoría que se basa en las contingencias o situaciones.


La misma significa que las personas se convierten en líderes no solamente debido a los atributos de sus personalidades, sino por una correlación de factores situacionales; las interacciones entre los líderes, su tarea, su posición, los miembros del grupo y el contexto.


Hablar de perfiles de liderazgo como distintivos entre administrador o dirigente, había llevado a intentos de caracterizar individuos con particularidades de personalidad, cualidades superiores, dotados de un gran "carisma", o incluso con aptitudes físicas especiales.



Ello queda superado en la medida en que no es posible determinar un conjunto de atributos unívocos que puedan definir en diferentes circunstancias, tareas, grupos y entorno al líder.

La idea que se desprende entonces, la más generalmente aceptada en la actualidad, llama a un papel así “liderazgo Situacional, Contingencial o Transformacional”, en medida que depende de cada situación.

En éste modelo el director-líder “transformacional”, el hombre y su conducta “transforman” el potencial de los empleados, la empresa y el entorno, en realidades concretas que se materializan bajo su dirección.

El “liderazgo-administrador” situacional, está pues, determinado por CINCO factores que vimos en la figura anterior:

.1. La naturaleza del entorno, ambiente, escenario, contexto o situación externa, en cuanto a si es estable, fluida o cambiante, rápida, continua o discontinua y las posibilidades de su interpretación.

.2. La relación del superior con sus subordinados, entendido como el grado de aceptación del líder (formal/informal) por parte de los integrantes del grupo (equipo).

.3. La estructura del trabajo, considerando el grado de especificidad con que la tarea debe realizarse (puesto).

.4. La posición de poder del líder, identificada como las atribuciones,  influencia y estatus derivado del propio cargo y la personalidad.

.5. Las particularidades de la   situación, en cuanto a si requiere acometerla con rapidez o decisión, o admite análisis e integración más pausada.

.b. Teoría de la Política de Dirección.
En 1979, dentro de su proyecto de Teoría de la Política de Gestión, en el “segundo capítulo” examinó el liderazgo, enfocándose no ya en las cualidades personales, sino en lo qué hace el dirigente(8).

Foto Reactivo Proactivo

En la misma línea, en otra obra(9), incluyó textos significativos de Selznick(2), de los que nosotros también rescatamos…




“…La mayoría de los escritores han concentrado su atención en los estadistas políticos, líderes de comunicaciones enteras que se ubican en los sitios más altos, donde se estudian y resuelven grandes problemáticas.
En nuestra época la necesidad de proseguir con estas reflexiones no ha   disminuido ni decaído y estamos aún interesados en aprender a conciliar el idealismo con la conveniencia, la libertad con la organización.
El argumento expuesto es muy simple: el ejecutivo se convierte en un hombre de estado (líder) al momento de realizar la transición que va de la gerencia administrativa al liderazgo institucional.
Este viraje implica una reevaluación de sus propias tareas y de las necesidades de la empresa; está determinado por la preocupación que origina la evolución de la organización como totalidad incluyendo sus objetivos variantes y sus capacidades.
Implica conceptualizar la organización como una institución… (y a su trabajo como “liderazgo institucional”).
(En este sentido el)…significado más importante de “institucionalizar” quiere decir infundir valor más allá de los requerimientos técnicos de la labor a realizar.
La prueba de la infusión de valor es la “calidad de desechable” (o no).    Si una organización es un mero instrumento, será modificada o desechada con facilidad cuando se disponga de una herramienta más eficiente.    Es por ello que, casi todas las organizaciones son desechables.
Sin embargo, cuando ocurre la infusión de valor se produce una resistencia al cambio.
(Si se quiere eliminar una institución)…la gente experimenta una especie de pérdida personal; la identidad del grupo o comunidad parece haber sido violada de alguna forma, sus integrantes ceden ante consideraciones técnicas o económicas con pesar y de mala gana.
En resumen, las organizaciones son instrumentos técnicos diseñados como medio para la realización de ciertas metas.
Las instituciones, (…) son producto de la interacción y la adaptación.    Se convierten en los receptáculos del idealismo grupal y no pueden desecharse con tanta facilidad.
Cuando falta el liderazgo institucional se debe no tanto a errores o equivocaciones cometidas,   sino, con más frecuencia, a la carencia de éste.
Y así, la institución va a la deriva, expuesta a presiones errantes y excesivamente influida por destinos a corto plazo y siempre oportunistas.
La mera velocidad, frecuencia y vigor en la toma de decisiones puede tener poca relevancia en el más alto ejecutivo…”

Las actividades directivas o de gestión detectadas revistieron las siguientes categorías…

1.
Actividades Interpersonales
Esta función incluye actividades de relación con las personas que trabajan en la organización.    Se constituyen así, acciones de apoyo para las funciones de información y de toma de decisiones.
Los papeles interpersonales se pueden clasificar en:
.a. Cabeza visible
Representación de la organización, papel de mascarón de proa ceremonial y simbólica.
.b. Jefe Superior
Líder organizacional en términos de reclutamiento, motivación, definición de la cultura, visión, etc.
.c. Enlace
Liasoning con organismos externos e internos y actividades de relaciones públicas, imagen, etc.
2.
Funciones informativas
Se refiere al papel de la asimilación y retransferencia de información y a sus respectivas “subfunciones”.
.a. Monitor
Para recolección de información de las organizaciones, tanto desde dentro como fuera de la organización.
.b. Difusor
La comunicación de información a los miembros de la organización.
.c. Portavoz
Es quien representa a la organización frente a los de fuera.
3.
Rol de Decididor
Corresponde a su capacitad de seleccionar alternativas preferibles y existen las siguientes categorías:
.a. Actividad Reactiva o de “respuesta”
Conducta de toma de medidas correctivas para hacer frente a la situación adversa, acción de solucionador de problemas.
.b. Actividad Proactiva o “por su cuenta”
Conducta Empresaria, emprendedora, rol iniciador de nuevas ideas para mejorar el desempeño organizacional.
.c. Asignador de recursos
Sean humanos, físicos, capacidad de tomar decisiones, información o monetarios.
.d. Negociador
Lo que agrega capacidad para efectuar intercambios con pequeños ajustes de “prueba y error” generando agregación de valor mutuo: negociar con los sindicatos, con stakeholders, el gobierno, o los stakeholders representantes de cualquier otra parte interesada


.c. Formación para la Dirección”(10)
Más recientemente (2005), en la misma línea de estudios, se enfocó en la “capacitación”, y allí correlaciona la “propensión a la formación y capacitación” del directivo, con la edad y experiencia y la importancia del puesto ocupado.





Posteriormente, continuando este tema en 2010 en el documento “Del Desarrollo Directivo al Desarrollo Organizacional con Impacto” (From Management Development to Organization Development with Impact), documento que libre disponible en la página web del autor.


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Asimismo, consideremos la posibilidad de "capacitar" o no a los directivos parta sus funciones "dirigentes", para lo que agregamos la siguiente Tabla de Indiferencia.
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.4. Modelo de  Dave Ulrich
La frase "Dominar los atributos del liderazgo no basta; un líder eficaz tiene que conectar los atributos con resultados" sintetiza la visión (1999) de Dave Ulrich.



Allí, sostiene que lo esencial es conducir adecuadamente, tal que "…los líderes de resultados deben satisfacer cuatro criterios para que sus resultados sean eficaces: ser altruistas, estratégicos, duraderos y equilibrados…”, lo que quizás podemos esquematizar con “nuestra” figura de los 4 cuadrantes.


Si la naturaleza utiliza ciertos principios para crear su diversidad infinita, es altamente probable que tales principios se puedan aplicar a las organizaciones y al tipo de liderazgo humano.

Mientras tanto, las destrezas van tomando un sesgo relacional.

Esta última razón ya se había puesto de manifiesto en 1996, cuando sostuvo:

(14)”…los buenos líderes del futuro deberán ser capaces de crear aptitud organizacional.

Esta procede de líderes que son capaces de formar, estructurar, poner en práctica y mejorar procesos organizacionales para alcanzar los objetivos de la empresa.

Las organizaciones más capaces proceden de empleados con más talento y más comprometidos.

Asimismo, en este modelo sencillo, un líder debe engendrar credibilidad personal y crear aptitud organizacional (figura).

A algunos líderes se les enseña a ser personalmente creíbles, a promover buenos hábitos,  llevar vidas virtuosas y a crear carácter moral.

Todos estos atributos personales son nobles y valiosos, que no son suficientes, sino que además deben alinear y ajustar las organizaciones, movilizar recursos, dar forma  visiones, diseñar procesos y sistemas e incorporar responsabilidades.

Estos líderes hacen competitivas a las organizaciones, pero si no crean credibilidad personal, fracasarán.
Esta perspectiva del liderazgo, puede formularse con dos preguntas generales de diagnóstico para evaluar la calidad del liderazgo:


.1.
Credibilidad: ¿Merece credibilidad este líder por parte de quienes  trabajan con él?    ¡Los individuos confían, respetan, admiran y disfrutan trabajando para este líder?    ¡Se sienten vinculados personal y emocionalmente con éste líder los que trabajan como subordinados, los compañeros, los clientes o los supervisores?
.2.
Aptitud: ¿Posee este líder aptitud para hacer que tenga éxito la organización?    ¡Posee la aptitud necesaria para configurar una visión, crear compromiso con la visión, elaborar un plan de ejecución, desarrollar aptitudes y hacer responsable  la gente para conseguir que estas cosas sucedan?




DIRECCIÓN BASADA EN RESULTADOS


Antes, cuando privilegiábamos las tareas y se consideraba a la gente como un inconveniente molesto, no se pensaba en términos de “liderazgo situacional”; en cómo la situación podía afectar nuestra elección de estilos.

El liderazgo es siempre dependiente del contexto, pero el contexto se establece con las relaciones que valoramos.

No podemos esperar influir sobre ninguna situación sin respetar la compleja red de personas, de relaciones, que contribuyen a nuestras organizaciones.


Sin que signifique una innovación respecto de Ulrich ni de Peter Drucker (Managing for Results, 1964), Jack Zender y Norma Smallwood definen su versión del liderazgo basado en resultados (Liderazgo basado en los resultados: ¿Cómo Construir Líderes de Negocios y mejorar el resultado final?, 2000).



En los “tiempos modernos” se llama a esto “reinventarse” o siguiendo a Gary Hamel, “resiliencia”.    Cambian las palabras pero designan lo mismo…    Ya lo tratamos al considerar los paradigmas.


.a. Modelo de Edward Marshall
Edward M. Marshall presenta en 2004 una faceta del liderazgo situacional; pensado en la “acción”, en “Cambiando la forma que tenemos de Trabajar”.


Allí correlaciona elementos que ante la necesidad de mejorar la competitividad traída por la globalización, son considerados con mucha atención, como los ya conocidos compromiso y proactividad.



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Al entender las actividades de éste protagonista, como parte del proceso de conducción que puede aprenderse; se han desarrollado modelos que describen las conductas preferentes para lograr que los individuos realicen el trabajo o la actividad propuesta colaborativamente.

Desde esa perspectiva, se logra una eficaz, eficiente y efectiva operación, “cruzando” parámetros como Cultura de trabajo del lugar, Trabajadores y Modelos de Negocios, Recursos, Estructuras y Sistemas con acción dirigente en la Visión.

El modelo apoya al dirigente en su Reputación.

A este esquema de situacional, presentado en la figura, se lo conoce como Liderazgo de Trabajo Colaborativo, y como se ve, los elementos determinantes son “Reputación” y el rol de “Piloto” del jefe superior más dirección y sus estilos.

Asimismo, combinando componentes de compromiso del directivo con actitud organizacional resultando cuatro tipologías:

Influyente
Colaboracionista
Facilitador
Dirigente Controller

Como se advierte, un “puente” entre la clasificación anterior y la presente.





¿Y SI PARA EL DIRECTIVO TODO ES POLÍTICA…?



Hay muchos desafíos por allí, a los que sumamos el lograr comprender y utilizar la política a favor de nuestros intereses.

Desde ésta perspectiva, Kathelen Reardon(11) nos explica por qué el talento y el trabajo duro por sí solos no llevarán a las posiciones prominentes.

Con demasiada frecuencia, lo que separa a los ganadores de los perdedores en las organizaciones es la “política”.

Al efecto, usamos para definir “política”, de igual modo que en anteriores ocasiones, al esfuerzo por llegar dominar el uso del poder para dirigir.



Como explica Reardon, los empleados más talentosos y logrados, a menudo se conforman con un puesto menor que sus compañeros de trabajo políticamente más aptos, perdiendo terreno en la carrera por salir adelante, llegando a veces incluso a perder sus puestos de trabajo.


Se identifica en su modelo, cuatro estilos de liderazgo, llamados políticos, por su esfuerzo en el sentido del poder.

Lo resumimos en nuestra ya conocida matriz de cuatro cuadrantes.

Obviamente un puritano no aceptará convertirse en manipulador bajo ninguna circunstancia, pero cuando es acorralado se transforma en luchador.

En una organización de baja política predomina el luchador, el jugador de equipo se establece mejor en un ambiente moderada o altamente político, más es el manipulador el que prevalece siempre en casos de alta política o patológica.

Aprendemos y nos adaptamos a la forma en que la gente hace las cosas en todas partes, "somos todo el tiempo" políticos, y toda nuestra vida mantenemos ese estilo.

Sin embargo, exploremos la interpretación de la matriz resultante si, para compatibilizarla con la práctica del autor, se invierte el sentido de los ejes.


Esta permutación es siempre posible y generalmente de interés cuando se cargan variables sobre esta matriz.

¡¡Manipulador y puritano cambian de puesto!!; ¿¿con todas las implicancias que su relación con un interrogante??, y con una tipología que genera mucha utilidad…




¿Y SI EL DIRECTIVO NO DIRIGE, o DIRIGE SÓLO A SU FAVOR o ES PERVERSO...?



.a. Dirección de Kusy Essex(12)
El entorno de una organización puede ser simple o complejo, que varía desde el que rodea la heladería que produce mercadería sencilla, a la central nuclear que requiere actuar en áreas de científicas especializadas.

Por ello, las técnicas de dirección variarán según que los grupos de trabajo deban conducirse en medios estables sin grandes innovaciones, o bien en contextos dinámicos y con fuertes presiones hacia el cambio.

A éste último tipo de dirección se denomina "orgánica" (por su similitud a los seres vivos, esencialmente adaptables y flexibles), y es el único modelo que puede hacer frente a la continua serie de problemas impredecibles de una situación así.



Muchos consideran que éste es el modelo "final", pero el mismo ha devenido en un uso frecuente muy inadecuado, aunque inicialmente se lo “justificó” como una necesidad frente a la “globalización” y la “competitividad a ultranza” que se derivó.

Resulta visible que en muchas ocasiones

.la comunicación oral (el discurseo de consignas) se hace con baja preparación;

.salvo excepciones, no es revisadano deja constancia; y

.si se producen fallas siempre se aduce que lo dicho “fue mal interpretado”.

Tal cosa no ocurre por error, sino que deviene de un tipo de dirección, a la que llamamos “malsana” o “perversa”.

Mitchell Kusy Louellen N. Essex(11) revelan las acciones más comunes usadas por directivos de esta clase, e identifican sus pautas, la mayoría de los cuales suele atribuirse a “ignorancia respecto al manejo de la complejidad”.


Examinando sus elementos se advierte…


Fallos de Análisis Político
Los dirigentes comienzan a experimentar crecientes problemas cuando les fracasa la consideración política hacia sus subordinados, ya que no hacia sus superiores en tanto que la misma hace a su propio avance personal.

.1. Falla en la inteligencia emocional, especialmente cuando no se ha desarrollado lo suficiente para interpretar las dinámicas del poder y de la influencia en las organizaciones.
Aunque el directivo no cultiva este tipo de inteligencia, en cuanto a reaccionar frente a desafíos de manera coherente, creativa y conciliadora, es claro que no puede permitirse por mucho tiempo este tipo de defecciones.

.2. Desatención a la identidad organizacional y a los aspectos culturales que conforman avisos de cómo se están haciendo mal las cosas.
Falto de apoyo en este sistema de creencias, no se desarrolla el poder condicionado relacionado con la persuasión y el compromiso de los individuos.
Tampoco hay sometimiento espontáneo, porque a quienes debería referirse consideran que la gestión no es natural, justa ni correcta.

.3. Ignorancia del funcionamiento sistémico, mayoritariamente el poder coercitivo o –cuando le resulta posible- el compensatorio de modo permanente y no como incentivo coyuntural.
También se incluye la pretensión de gestionar sin apoyo de coaliciones adictas, la falta de credibilidad o de conocimiento.

Este tipo de líder no modificará este régimen de trabajo, salvo que la situación se torne una crisis grave y lo obligue, por lo que para “mostrar” un ajuste “mejorador”, algunos pasos comunes son…

.4. Descubrir cómo funcionan las cosas realmente, aprehender los elementos del poder y la influencia desatendidos, entender la burocracia, y los modos de resolución de problemas
B
.5. Inventariar los otros dirigentes claves para regenerar su colaboración, de ellos, principalmente los que controlan recursos, lo que se encamina a encontrar a quienes conservan la confianza dentro de la empresa, tienen influencia o pueden dar consejo, asistencia o competencia.

.6. Elegir y mostrar un nuevo rumbo hacia el éxito, dando crédito por lo que se consigue.


Clima laboral represivo
Este tipo de clima organizacional está presente toda vez que las personas o equipos tienen graves dificultades para comunicarse y entenderse.

PPT actitudes de la direc.

Ello ocurre porque las posturas del directivo siguen líneas de este tipo:

.7. Es coercitivo y dominador, como antes se expuso, y por ello nadie se siente seguro adoptando cualquier posición que pueda ser vulnerable.    No se pide creatividad ni innovación.
Ello determina estilos defensivos, retención y ocultamiento de información y gran temor a las consecuencias indeseables derivadas:

.8. Se maneja con gran distanciamiento interpersonal, el líder está desentendido y solo oye lo que el grupo cree que éste desea escuchar.

.9. Cuando decide interpelar a los subalterno, lo hace con espíritu crítico a efectos de ponerlos a la defensiva.

Pero, el clima se restaura o recrea….

.10. Analizando el estilo de respuestas a las fallas del personal, evitando culpar a los participantes.

.11. Diluyendo la angustia por medio de reuniones que pongan de manifiesto los problemas y proyecten cambiar la situación.

.12. Instituyendo un sistema de premios para los actores que revelen áreas de problema, los asignen y los entreguen.


Fracaso en el reclutamiento de talentos

¿Cómo puede, un mal directivo encausarse hacia la formación de equipos talentosos?    ¡No puede!

No le interesa el éxito sino el fracaso de los demás, y solo espera de éstos que mantengan la organización funcionando.

Figura Psi Institu

Sólo atenderá este asunto si el trabajo básico que constituye su responsabilidad resulta comprometido o cuando la ecuación económica ingresos/beneficios-egresos/costos se torna desfavorable y plantea la necesidad que dé explicaciones a los superiores del propio directivo.

Mientras no ocurre esto, el fracaso en dicha área es esperable, la medición del rendimiento se usan como medios coactivos de dirección.


Demasiadas Heridas

El mal gerente abusa de su fuerza coactiva o compensatoria, su gestión es discrecional y no procura desarrollar ninguna habilidad adicional.

Este modelo de dirección falla inmediatamente que la fuerza afloja, lo que ocurre sea por sobrestimación de las capacidades no técnicas (manipuladoras) o el predominio de una perspectiva angosta (indecente) de exclusivo beneficio personal.

Los abusos provocados dejan a muchos subalternos lastimados, o aún peor, alienados en una continua y dudosa reinterpretación de los mensajes y el doble discurso que viene del superior.

Si la dirección decidiera actuar en este frente se presentan estas posibilidades.

.13. Disminuir inmediatamente las interacciones remanentes y su visibilidad respecto de los lesionados y desquiciados con las acciones previas, permitiendo que el tiempo los ayude a sanar.

.14. Obtener consejo individual inmediato centrado en las cuestiones personales y en recuperar la credibilidad.

.15. Buscar mentores plausibles que provean de información sin “visión de túnel”, colaboren en hallar acciones de respuesta a los problemas más importantes, y crear las condiciones para que se desarrolle el pensamiento estratégico.


Alineación
Se presenta cuando las iniciativas estratégicas coinciden con los objetivos a corto plazo.

Resulta llamativo que aparezca una clase de “alineación” básicamente deseable se constituya en fuente de dificultades.

El director fija iniciativas estratégicas que importan su propio beneficio, así como objetivos a corto plazo que significan operaciones básicas a cumplir que justifican la existencia de la organización.

Como la actividad esencial se cumple más o menos regularmente, es como una clase de Caballo de Troya que oculta el propósito del director sin escrúpulos.

Cuando los subordinados comprenden la divergencia implícita, se revela la desalineación¡y ese es el problema!

Es muy visible la discordancia cuando el directivo está muy centrado en su propia agenda, mientras que la prestación operativa, para sobrevivir y crecer, debe tolerar un cierto desvío de las pautas culturalmente aceptables, el espíritu emprendedor o que las personas actúen con más libertad.

Aun sin contar con el mal dirigente; éste si bien no genera espontáneamente iniciativas de recuperación, no se opone a que otros las pongan en marcha.

A todos los restantes niveles se les torna crítico e indispensable actuar “más allá de los jefes” para rearticular la organización con acciones como…

Admitir la desalineación
Como siempre, lo más difícil es admitir que se va por el rumbo equivocado, abandonar lo que se hacía y moverse con un nuevo enfoque.
Cortar con las pérdidas
Es necesario cortar las pérdidas o aumentar las ventas o ingresos inmediatamente para restablecer el equilibrio financiero, procurando identificar su origen, así como impedir que la jerarquía pretenda responsabilizar a los equipos de trabajo aplicando sanciones.
Recuperar la proactividad
Recuperar una interpretación proactiva, que incluya el análisis de las estrategias vigentes, el trabajo que se realiza y el “gap” existente, determinando la existencia de actividades viables aún posibles y la limitación, en cuanto sea posible, del trabajo desalineado.


Derrumbe del compromiso
Ocurre con frecuencia se presenta debido a limitaciones o bloqueo en el uso del talento laboral disponible.

Dado que los líderes implacables en el logro de sus objetivos son por naturaleza egoístas y distantes, no debe extrañar que hagan un mal uso de las capacidades de los subordinados (las organizaciones y las personas son para ellos solo “medios”).

No se preocupan por que aquellos vean en él un obstáculo para sus carreras y para su propia satisfacción individual.

Él sabe qué es el cumplimiento de las operaciones básicas que desarrollan sus grupos o equipos lo que sostiene su capacidad para actuar hacia el afuera, más esto no le preocupa.

Tampoco piensan que el clima laboral afecte las acciones de los empleados, sabe que “a pesar de todo”, especialmente si predomina una economía con problemas y peligro de desempleo, las cosas se harán.

Si la situación fallara, o a algún subordinado se les volviera intolerable, esperan poder hallar otros en las mismas condiciones; y aciertan en dicha idea, pues eventualmente lo logran.

Consigue conservar una dudosa cohesión mediante la imposición de sus preferencias a individuos o grupos, ya que estos deberán optar por alguna continuidad frente a otras alternativas mucho más desagradables.

De todos modos, esto tiene límites.

Los comportamientos habituales se hacen evidentes en faltas de entendimiento de las necesidades de los empleados, no involucramiento en las decisiones (verdaderamente) importantes o de solución de problemas, inexistencia de delegación política y cuestiones de comunicación inadecuada.

Para este tipo de dirigentes, esta clase de problemas parece arrancar en la obcecación en el interés propio, que lleva a falta de adaptación y flexibilidad, y el continuo ajuste y reajuste de prioridades directivas conforme cambian las condiciones y conveniencias de cada momento.

La figura esquematiza el modelo: el cuadrante conservador es la que mejor “paga” (extraer de la vaca toda la leche posible).

No existe un repertorio de acciones exitosas que el subordinado pueda emprender para mejorar el compromiso; si debe tenerse en cuenta que el directivo sólo se ocupa de “sus asuntos” y que la situación no le molesta en lo absoluto

Un instrumento idóneo en tal caso es el esfuerzo por volver a proporcionar una sensación de realización, que tiene muchas formas aunque muy pocas de ellas resultan adecuadas a todas las situaciones.

Fijar metas
Sirven para que las personas satisfacer el natural deseo de asignaciones específicas, y trabajarán con ardor por aquellas que se haya fijado ellos mismos.
Deben ser realistas, poder lograrse en un futuro inmediato y permitir obtener alguna compensación si tal cosa ocurre.

Desintegrar el trabajo en partes que tengan sentido
Mejora la sensación de realización la percepción de que se completa una cierta labor.
Si la unidad de trabajo es demasiado grande, la meta de verla completa queda demasiado distante para generar deseo de concretarla.

Informar sobre los avances que se van logrando
Incluso en los casos en que la actividad no se relaciona con salarios incentivados o con la preservación de la fuente de trabajo, a todos les gusta estar enterados de lo que se hace.
Aplicar índices de eficiencia a la plantilla administrativa sirve al mismo fin.

No desintegrar partes de unión natural
Si las personas se dedican a su labor, cualquier interrupción le sabe mal
Comenzar nuevos trabajos entre horarios o cambiar de tareas debe evitarse.

Destacar la importancia del trabajo de cada uno
Cuando las operaciones son de naturaleza muy especializada o rutinaria, el trabajador deja de tener una clara noción de la relación entre ella y el proceso global, lo que se agrava al comprender que dicho proceso no es el significativo para el gerente “sin códigos”.
Quien se ocupe en este caso debe reforzar el sentido de que los desempeños tienen importancia para el conjunto.

Finalmente, a partir de las definiciones extraídas de Kusy y Essex resumimos los elementos significativos del modelo presentado.

.16. Reconocer los errores y asumir las responsabilidades totalmente.
Si un “director sin códigos” o un subordinado alienado puede ajustar su actitud a este precepto se pone en camino para recuperar la gestión y eventualmente la organización.

.17. Formar un equipo especial.
La creación está destinada a apoyar las acciones de rebote, formándose con miembros de reconocidas habilidades técnicas, capaces de identificar lo que falló y   desarrollar estrategias correctivas.

.18. Asegurarse de usar la información adecuada e importante para decidir.
Se buscará fuentes confiables y creíbles de información que contemplen todo lo que fue desatendido.

.19. Disculparse
Debe hacer esto si “queda espacio” y para “abrir o crear nuevos espacios”, mostrar genuino arrepentimiento por las dificultades creadas, e informar ampliamente respecto de lo que se hará en el futuro para rectificar lo ocurrido.

El management tiene tantas facetas que el directivo puede basar la empresa en diferentes pilares.

Puede tratarse de un buen producto, buen marketing o buena gestión financiera, hay que tenerlos en cuenta para el manejo eficiente de las organizaciones, y además debe alinearse con las estrategias que éstas se hayan dado.

Ningún presidente, ningún CEO o director  es un especialista en todo, sólo puede tener algunas especialidades.

Por eso, si cualquiera de los pilares importantes no son sus atributos, tiene que incorporar alguien de afuera y desarrollarlo en la primera línea de dirección.

Los atributos se compran fuera, aunque lo único que no puede adquirirse es actitud y carisma.

La actitud y el carisma terminan moviendo a las organizaciones, es muy seguro que son otros de los activos de las compañías.

Un modelo no tradicional siguiente, es un desarrollo propio y se lo nombra como "liderazgo CRAC", tal como puede verse en el desarrollo que sigue.


Otra presentación de estas ideas aparece en el estudio de Richard Brinkman y Rick Kirschner(13), que no examinamos en detalle aquí, que examina una tipología más actual, respecto del cual en su ocasión elaboramos la siguiente figura y su video.

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Si a usted le interesa explorar otras presentaciones, le agregamos las siguientes que fueron incluidas en otros trabajos para su consulta.


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C0mo John F. Kennedy dijo, si el directivo es legitimado, representativo, creíble y responde a sus compromisos (es decir “con código”), su conducta hablará por si misma; si es lo contrario (garbage managers) de nada servirán las palabras.


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CONFLICTO ¿Por qué?


Toda situación implica una brecha entre un estado actual y uno futuro de deseos y necesidades.    Esta distancia variará según el grado de necesidad / deseo y cual sea nuestra propia percepción acerca de ello.

Cada individuo, de acuerdo a sus características personales, experiencia y cultura percibirá la realidad de una manera diferente, desde su óptica particular.

La competencia aunque busque el reconocimiento social en vez de la recompensa material, puede ser canalizada agresivamente, causando envidia o culminando en el odio.
Las amistades pueden ser destruidas; la confianza, traicionada; la dignidad, herida y las ambiciones, frustradas.
Algunos de estos conflictos producen enconos permanentes, aunque los arrastre la corriente de la vida sin dejar huella.

Es decir la realidad depende de quién la mire (así, el consultor o el analista administrativo es un observador).

Las diversas percepciones pueden derivar en conflictos de individuos, de y con la organización y de los individuos entre sí.

El conflicto y la armonía coexisten simultáneamente, son procesos antagónicos, inevitables y recurrentes.

Conflicto: divergencia de objetivos, habitualmente en lo referente a la asignación de recursos, la capacidad de tomar decisiones; o según Herbert A. Simon en Teoría de la Organización, por la proximidad entre unidades, o cómo resultado de determinar la prevalencia entre débiles poderosos.

Al interior de las organizaciones; en las que se desenvuelven proyectos en común; los empleados potencian sus propios recursos, haciendo más eficiente su tarea y agregan valor al proyecto organizacional, pero también dan prioridad a sus intereses y necesidades personales.

Es natural que así suceda.
Cada miembro de un equipo trae consigo aspiraciones, preferencias, actitudes y estilos diferentes.

Es razonable esperar, que ante los problemas que han de resolver juntos surjan desacuerdos.

Por ello, en todo equipo surgen roces y malentendidos, que si no se abordan adecuadamente, imprimen rigidez a las relaciones, socavan la confianza, bloquean la comunicación y paralizan la cooperación y el apoyo mutuo.

Podemos incluso afirmar, que los desacuerdos son positivos, ya que exponen las soluciones diferentes, todas meritorias, de los participantes.

Pero además y paradójicamente, el conflicto es necesario para el desarrollo.

En las culturas orientales se lo considera una oportunidad.

Esta diversidad de puntos de vista es lo que da valor a un equipo y; al propio tiempo dificulta su funcionamiento.

Se trata pues, de abordar las discrepancias, de tal modo que no degeneren en enfrentamientos y malentendidos peligrosos, sino que induzcan ajustes y logro de consensos para alcanzar soluciones acertadas.

Si la situación “escala” a diferencias de gravedad, lo apropiado es abordarlas inmediatamente.

Ante las mismas, las personas adoptan diversas posturas que forman parte del estilo “interpersonal” de cada individuo.

Si no se resuelven adecuadamente las contradicciones de los objetivos grupales y personales, se podrán producir expectativas divergentes o desacuerdos, que en casos límite, puede llevar a la ruptura del contrato psicológico.

En todos los casos, un aspecto significativo a considerar el de la confianza.

Confianza
.1.
Implica una expectativa, la de que otra persona actuará de cierto modo.
Confiamos en el proveedor cuando esperamos que nos entregue el pedido en las condiciones pactadas, y confiamos en el profesional al esperar que nos ayude a resolver un problema.
.2.
Involucra también la disposición de asumir el riesgo de que la otra persona actuará tal como está capacitada para hacerlo, es decir asumir la contingencia que no cumpla.
Se trata de un riesgo calculado, ya que responde a un juicio informado sobre la realidad y las cualidades de la otra parte (puede hacerlo, ¿lo hará?)




ACCIONES PARA RESOLVER



.a. Pasos
Se consideran los siguientes pasos tradicionales en la resolución de conflictos:

.20. Tomar conciencia del conflicto:
(en términos de la Teoría de la Decisión:
Identificar la necesidad de actuar)

.21. Exponer el conflicto: plantearlo, conversarlo lo cual permite identificar desajustes dentro de la organización
(Identificar alternativas y consecuencias), Desahogarse:
Si las partes se desahogan, probablemente generen pathos (sentimientos) suficientes que tiendan a mayor cohesión del grupo; y a que se diluya el problema.

.22. Resolver el conflicto: construir viabilidad para continuar con las tareas que la organización desea realizar
(Seleccionar o implementar) alguna de las acciones que se indican a continuación.


.b. Acciones
Existe un abanico de acciones que se pueden utilizar.


Habitualmente se presentan bajo la siguiente tipología:

Evitación
No se “habla” del conflicto; se utiliza y justifica invocando el dicho de que “el tiempo cura todas las heridas” (no sirve: el tiempo pasa y nada sucede)
Suavización
Se invoca la lealtad, el espíritu de cuerpo y la necesidad de mantenerse unido “limando las asperezas” (sirve poco: si la unión previa era fuerte, “quizás” se depongan diferencias, de lo contrario no se lo tiene en cuenta).
Negación
Se niega la existencia del conflicto o se bloquean las manifestaciones por las cuales el mismo se pone en evidencia (no sirve: los problemas negados “explotan en la cara” cuando menos se lo espera y peor preparado se está para afrontarlos).
Confrontación(-) negativa o “choque”
Cuando a una de las partes no le interesa el conflicto ni su resolución.
Confrontación(+) positiva
Opera cuando se “blanquea” la situación, y aborda directamente.    Se exploran las fuentes o causas, aclaran malentendidos, y se buscan soluciones satisfactorias de modo colaborativo, ya sea de modo.

Se trata de un comportamiento denominado asertivo.

Acomodaticio el vínculo o interacción es más importante que el conflicto

Cooperativo las partes están más interesadas en resolver el conflicto que en otra cosa

Si se logra avanzar hasta esta última acción, se abren tres procesos de resolución: negociación, mediación y arbitraje.



PROCESOS RESOLUTORIOS
¿CUÁLES?


La Negociación comprende el contacto directo de las partes involucradas, siendo el método primario para abordar la resolución de conflictos.    Las partes retienen el control del resultado y del proceso.

En Mediación un tercero ayuda y facilita la resolución del conflicto pero las partes retienen el control sobre el resultado, aunque requieren asistencia para desarrollar el proceso.

El mediador no negocia, hace que negocien quienes tienen el conflicto.

En Arbitraje, Litigio o Juicio, la decisión resolutoria del problema corresponde a terceros, el árbitro y el juez respectivamente.    Las partes ceden el control sobre los resultados y la conducción del proceso.

Negociación y Mediación son procesos consensuales en los que el control de resultado y proceso es alto por las partes implicadas.

El Arbitraje y Litigio son procesos de adjudicación. El control sobre los resultados y el proceso es bajo.




NEGOCIACIÓN


La negociación es un proceso de comunicación encaminado a lograr acuerdo donde existen intereses compartidos y contrapuestos.

Mientras dura, se concierta constantemente; en cualquier momento y lugar.

Todo es negociable.

En general el proceso sirve para 
Resolver conflictos de forma pacífica.

Comunicación
Mutua influencia
Análisis de la relación
de poder de las partes.
Que tiene como fin
la obtención de un acuerdo.


El acto de negociar implica voluntad, la explicitación de intereses u objetivos no idénticos, y supone intercambio y arreglo de los mismos.

Las negociaciones efectivas, son el medio para reducir enfrentamientos peligrosos o evitar el estallido de conflictos; además permite atenuar muchas de las tensiones que se producen en las relaciones empresariales.



¿POR QUÉ NEGOCIAR?

¿Porque razón se ha de negociar?

Se hace por pensar que se obtendrá algo mejor que de no hacerlo.  Negociación siempre da otras alternativas, que debe ser estudiadas para mejorar el resultado obtenible.

Las Posiciones
Si bien es cierto que existen negociadores intuitivos, con habilidades natas, las técnicas de negociación pueden aprenderse y usarse convenientemente con un buen entrenamiento.

Se comienza por definir las posiciones y los intereses.

Una posición es la postura ideal en que estarían los negociadores si no existiera el conflicto.

Es la posición inicial, a la que habitualmente nadie quiere renunciar y de la que es difícil apartarse.

Las posiciones representan enfoques rígidos de la realidad y cierran el camino a la identificación de acuerdos posibles, que representarían un mayor número de unidades de satisfacción para cada uno de los negociadores.

Constituyen un lugar emocional o psicológico en que el proceso se empobrece al limitar las posibilidades de ambas partes.

Negociar una posición es algo poco productivo, ya que por ser el “máximo”, un ideal irreal, inexistente o inalcanzable, normalmente retrotrae a la situación previa cada vez que se produce un avance.

Con éste sistema se advierte una cooperación débil o nula, la búsqueda de ganancia personal, o el intento de conseguir objetivos a expensas del adversario.

Es llamado también juego de “suma cero”, porque lo que gana una parte lo pierde la otra.

Da origen a duro regateo, al asumirse posiciones iniciales extremas, pedidos irracionales e intransigentes, y efectuar contraofertas absurdas.    No hay reciprocidad a cesiones realizadas por el oponente, y predomina la mezquindad en las propias concesiones.

Con frecuencia se opera como si no existieran fechas límites, como si el tiempo no existiera y por lo tanto no trascurriera hasta su agotamiento.

Los Intereses
El interés refleja el verdadero motivo de una posición, y se la debe determinar por deducción o inferencia.

Responde a la pregunta: ¿por qué?, ¿con qué propósito?

Por ésta característica, un interés siempre tiene más de una forma de satisfacerlo.

Se trata de entender cuáles son éstos, buscando las motivaciones o necesidades de los individuos que negocian; qué lo llevó a adoptar “posiciones”.

Los intereses suelen ser muy variados.

Negociar sobre intereses es muy cooperativo, ya que las partes buscan la forma en que ambas puedan cumplir sus metas, con el menor costo posible.

El valor que motiva la negociación no está fijo, vendrá dado por el grado de satisfacción que cada negociador pueda obtener como resultado del proceso.

Los negociadores procuran un acuerdo ventajoso para ambas partes.

Las dos deben sentir que van a ganar algo y perder algo, pero que el acuerdo será mejor que lo previo.

Lo importante es identificar primero cuáles son los intereses comunes, y luego concentrarse en aquellos diferentes.

Esas diferencias son la fuente de donde emerge valor porque contribuyen a agrandar la torta.

Las partes invierten todas sus habilidades y medios para obtener beneficios que por sí solos no obtendrían, explotar los elementos de valor de la negociación que no son tan obvios pero que a su vez pueden ser útiles a los fines de facilitar el acuerdo es la tarea del mediador.

Este tipo de negociación tiene en cuenta la perdurabilidad de la relación.

Sus ventajas podrían ser resumidas como sigue:

Si un empleado solicita aumento de sueldo, ésta es su posición; refleja un nivel explícito (quiere más), que puede satisfacerse de varias maneras: una mayor remuneración, o la misma pero ofreciendo un premio o beneficio no económico.    Esto dependerá sustancialmente de los intereses del propio empleado que subyacen al conflicto y que habrá que investigar para esclarecer y determinar.

El éxito de una negociación radica en satisfacer intereses de ambas partes y no en discutir o pelear por una posición, aunque en tiempos actuales existan pensadores que propugnan estrategias de este tipo (pelea callejera).

Eso depende principalmente de los valores que conformen la cultura del negociador o de la organización a la que éste represente.




¿ CÓMO NEGOCIAR?


A efectos de llegar a una negociación exitosa, son aceptados como válidos generalmente los siguientes cinco pasos:

1)
Suspender la reacción natural frente a las embestidas del otro, procurando entender las razones que impulsan las ofensivas de la otra parte
2)
Ponerse en el lugar del otro, y demostrarle que se puede escucharlo y comprenderlo sin que ello implique compartir su posición
3)
Reformular posiciones, demandas o pretensiones en términos de los intereses de cada parte, más allá de las posiciones iniciales expresadas
4)
Construir “un puente” que le permita al otro recorrer el camino desde su posición inicial hasta un acuerdo sensato
5)
Utilizar el “poder para educar” al otro acerca de las consecuencias de no llegar a un acuerdo.    No usar el poder para presionarlo y que “cierre” de una vez”

Las herramientas de uso son:

6)
Entrevistas: resultan importantes para llegar a conocer a las personas involucradas.    Es necesario llegar a saber el tipo de trabajo que cada uno realiza, ver cómo perciben su labor, si la visión, misión y objetivos de la organización están bien comunicados, y si esas personas están involucradas en su consecución.
La labor de contacto es de naturaleza muy especial.
7)
Preguntas: se determina el tipo de preguntas que se efectuará de acuerdo al criterio del equipo o de la persona negociadora.
Podrán ser abiertas primero (para poder conocer), y con más nivel de detalle a posteriori.
8)
Perspectiva aérea: significa sobrevolar la organización; analizarla a la luz de los elementos recogidos, de las mejores alternativas que pueden plantearse procurando una negociación que contemple la satisfacción de la mayor cantidad de intereses posibles.

mayor cantidad de intereses atendidos, siempre el acuerdo es más productivo y duradero, dado que las partes contribuyen al diseño de las alternativas, generando opciones, eligiendo y después aceptando las mejores para todos lo cual les confiere gran legitimidad.

Es decir, que para lograr una negociación exitosa, con ellas se pretende:


Indagar buscando los intereses de las partes.

Aclarar los intereses subyacentes.

Asignar prioridades a los intereses.

Clasificar los intereses por orden de importancia para usar de guía al procurar incrementar el “pastel”.

Buscar asuntos relevantes y separarlos de la gente, pues así mejorara la relación entre las partes.

Alentar la buena relación de las partes.

Generar opciones, ya que cuantas más se creen mayor será la posibilidad de conciliar intereses de manera eficaz.

Procurar minimizar las diferencias entre las partes.

Examinar los recursos y habilidades de cada una de las partes o colaborar en su aplicación para realzar el valor que cada parte podrá obtener.

Considerar el beneficio conjunto en oposición al beneficio independiente o separado evaluando si ambas partes obtendrán el mejor acuerdo.     El resultado de la negociación no debe ser inferior a la mejor alternativa posible    Esto muestra respeto hacia la otra parte que negocia.

Buscar criterios de legitimación, de justicia e imparcialidad.    Aunque éstos puedan ser externos, ayudan a elegir entre las opciones que se van generando, y a  todos.
Verificar que la comunicación se dé correctamente; para que lo que una parte expone sea comprendido e interpretado adecuadamente por la otra, y si es preciso reformular lo planteado.
Conducir a compromisos realistas.    Debe tenerse una noción del resultado que se desea de la negociación, debe ser claro, duradero y bien planeado.
Planificar los compromisos de puesta en marcha que deben tratarse para implementar el acuerdo antes de terminar la negociación. 


La mayoría de las empresas, todavía tiene mucho camino que recorrer para identificar y potenciar a su cultura, impulsar su creación de valor y diseñar nuevos métodos de resolución de conflictos.

Esto debe hacerse en un contexto de elevada y dura competitividad a escala mundial.

Y la presión, "lejos de disminuir, no deja de aumentar".



Referencias
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Mayo George Elton, Los Problemas Humanos de la Civilización Industrial, (The Human Problems of an Industrial Civilization, 1933).
2.
Selznick Philip, Liderazgo en Administración, (Leadership in Administration, Harper y Row, 1957).
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Mintzberg H., Repensando el Planeamiento Estratégico, (Rethinking the Planing, London Business Review), 1993).
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Blake R. y Mouton J., The Managerial Grid: The Key to Leadership Excellence, 1964.
6.
Strauss G., Sayles L.R., Los  Problemas Humanos de la Dirección, 1961, (The Human Problemas of Management, 1950), Editorial Herrero SA, México, Pág. 131.
7.
Strauss G., Sayles L.R., Los  Problemas Humanos de la Dirección, 1961, (The Human Problemas of Management, 1950), Editorial Herrero SA, México, Pág. 308.
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Mintzberg. H., La Naturaleza del Trabajo Directivo, 1984 (1979), Editorial Ariel, Barcelona, Pág.14.
9.
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Mintzberg Henry, Formación para la Dirección, en castellano en Management Herald, N° 40, noviembre 2005.
11.
Reardon Kathleen K.; Todo es Política (All It’s All Politics – The Doubleday Broadway Publishing Group, 2005.
12.
Kusy, Mitchell; Essex, Louellen N.; Rompiendo el Código de Silencio (Breaking the Code of Silence - Taylor Trade Publishing, 2005.
13.
Brinkman Richard; Kirschner Rick, Tratando con gente difícil (Dealing with difficult people, 2006)
14.
Goldsmith, Marshall, en El Líder del Futuro (1996), compilado por F. Hesselbein; M. Goldsmith y R. Beckhard, Ediciones Deusto SA., Buenos Aires, 2005, Pág. 244 y ss.





PALABRAS CLAVE
Actividad Proactiva, de iniciativa o “por su cuenta”, Actividad Reactiva o de “respuesta”, Administrador Contingencial, Administrador Transformacional”, Alineación con los objetivos, All It’s Politics, 2005, Arbitraje, Asignador de recursos, Robert Blake, Kenneth Blanchard, Bernard M. Bass, Breaking the Code of Silence, 2005, Brinkman Richard, Cabeza visible, Confianza, Conflicto, Confrontación(-) Negativa o choque, Confrontación(+) positiva, Continuo del Liderazgo, Difusor, Dirección Basada en Resultados, Modelo de Edward Marshall, Dirección que no dirige, Dirección Todo es Política, Peter Drucker, El Proceso Estratégico (1997), (1992), Empowerment (dar “poder” o capacidad de tomar decisiones), Enlace o Liasoning, Louellen N. Essex, Evitación, Funciones informativas, Funciones Interpersonales, Funciones o Rol de Decididor, Harold Geenen, Douglas Mc Gregor, Gary Hamel, Paul Hersey, “Hombre X”, Robert House, International Telegraph; Telephone Corp., Interpersonales, Jefe Superior, Dewey Johnson, John F. Kennedy, Mitchell Kusy, La Naturaleza del Trabajo Directivo, 1984 (1979), Las Posiciones, Leadership and Organization, 1961, Leadership in Administration, 1957, líder “institucional”, líder “Situacional”. Liderazgo “Club de Campo”, Liderazgo Burocrático, Liderazgo de Equipo, Liderazgo de trabajo Colaborativo, Liderazgo Empobrecido, Liderazgo en el Medio, Rensis Likert, Litigio o Juicio, Kirschner Rick, Los Intereses, George Elton Mayo, Managing for Results, 1964, Edgard M. Marshall, matriz GE-McKinsey, Mediación, Henry MintzbergModelo “Trayectoria-Meta”, Modelo de Bernard Bass, Modelo de Blanchard, Hersey y Johnson, Modelo de Dave Ulrich, Modelo de Kusy y Essex, Modelo de Mintzberg, Modelo de Likert, Modelo Formación para la Dirección, Monitor, Jane Mouton, Negación, Negociación, Portavoz, Procesos Resolutorios, Psicología Industrial, Kathelen Reardon, Recursos humanos, Rejilla del Liderazgo, Relaciones Humanas, resiliencia, Rethinking the Planning, London Business Review, 1993, Rol Negociador, Warren H. Schmidt, Philip Selznick, Herbert A. Simon, Sistema "0", Sistema "1": autoritario explotador, Sistema "2": autoritario benevolente o paternalista, Sistema "3" consultivo, Sistema "4" participativo, Sistema "5": participativo con autoridad relacional, Sociología Industrial, Suavización, Robert Tannembaun, Teoría de la Organización, Teoría de la Política de Gestión, Teoría de los Seguidores o Adeptos, Teoría del Ciclo de Vida de Liderazgo, Teoría del Gran Hombre, Teoría del Liderazgo Situacional, Teoría Ecléctica, The Human Problems of an Industrial Civilization, 1933, The Human Problems of Management, 1950, The Managerial Grid: The Key to Leadership Excellence, 1964, Dave Ulrich, Universidad de Michigan, Jack Zender

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